Carlo Marsili, ex Embajador de Italia en Ankara, fue el invitado del último episodio de la miniserie «Eylül Aşkın İle», presentada por Eylül Aşkın. El episodio, filmado en el Circolo degli Esteri en Roma, se centró en la importancia del poder blando (soft power) en la diplomacia cultural.
Sirvió en Ankara entre 2004 y 2010
Carlo Marsili se desempeñó como Embajador de Italia en Ankara entre 2004 y 2010. Marsili mencionó que, durante su mandato, había una falta de prácticas —o aún no estaban popularizadas o bien conocidas— para obtener datos concretos que midieran el impacto del poder blando en la diplomacia cultural. Defendió la opinión de que la opinión pública es influyente en las actividades políticas.
Sirvió 3 años adicionales porque su esposa es turca
Carlo Marsili declaró que, debido a que su esposa es turca, su mandato en Turquía, que normalmente debía terminar en 2007, fue extendido por el propio Recep Tayyip Erdoğan.
A Carlo Marsili, quien fue acogido más fácilmente por el pueblo turco debido a que su esposa es turca, el entonces Primer Ministro Recep Tayyip Erdoğan le dijo directamente: «Que se quede». Marsili también confesó en una conversación extraoficial (fuera de cámara) que, durante su estancia en Turquía, algunos ministros nacionalistas aceptaron recibirlo en sus despachos solo después de enterarse de que su esposa era turca.
Esto demuestra claramente que la existencia de una cultura común o similar crea un efecto más suave y unificador en la diplomacia, fomentando percepciones más positivas dentro de la sociedad de que el funcionario en el cargo puede entenderlos.

«Pase dos días en Turquía, su opinión cambiará.»
Carlo Marsili enfatizó que la verdadera Turquía no es suficientemente conocida o es malinterpretada por Europa, señalando que la mayor razón de esto es el fracaso de Turquía en su autopromoción. Diciendo: «Pase dos días en Turquía y su opinión cambiará», Marsili hizo un llamado a los ciudadanos europeos, sugiriendo que los europeos que tengan la oportunidad de experimentar Turquía de primera mano encontrarán un panorama positivo, contrario a la imagen negativa de Turquía en Europa.
Los italianos en Turquía están interesados en las actividades del Centro Cultural Italiano
Carlo Marsili afirmó que los italianos que viven en Turquía asisten regularmente y/o muestran gran interés en las actividades que promueven la cultura italiana organizadas en Turquía. También señaló que las tasas de participación en eventos específicamente organizados para italianos son bastante altas.
«La sospecha a veces se convierte en una lucha entre países.»
Subrayando que los conflictos entre países a veces pueden basarse en la sospecha que surge de no saber qué piensa la otra parte, Carlo Marsili dijo: «La diplomacia cultural no puede resolver todas las crisis internacionales, pero puede ayudar a aliviarlas».
«Existe una gran simpatía entre las culturas italiana y turca.»
«Incluso ahora, cada vez que voy a Turquía, siempre veo esta felicidad», dijo Carlo Marsili, subrayando la atmósfera positiva entre Turquía e Italia. Declaró que los dos países se influyen mutuamente de manera positiva en sus relaciones culturales.